jueves, octubre 09, 2008




Vas al cine, te sientas y empiezan a largarte un mamotreto incomprensible y que no hay por donde cogerlo. Sales del cine impresionada, no te has enterado de la misa la mitad y piensas que eres medio gilipollas.
Vas al cine, te sientas y empiezan a largarte un mamotreto incomprensible y que no hay por donde cogerlo. Sales del cine cabreada, te saca de quicio que se queden contigo y piensas que el director es medio gilipollas.

Y luego decimos que no cambiamos con los años.