miércoles, noviembre 02, 2005




Reconozco que quizá me pasé en mi post del día 3. Sí, ese en el que aludía a ciertos comportamientos femeninos que me sacaban de quicio. Quizás, como alguno de vosotros me advirtió, se trataba de una retahíla de lugares comunes que difícilmente pueden sostenerse. Así que, si os parece, acabemos de una vez con el tópico primero de la fila, ése de que a las chicas les cuesta rascarse el bolsillo.
Se trata de un ejercicio muy sencillo, sólo tenéis que hacer memoria y contarnos por 25 euros la respuesta, en el caso de los chicos, las veces que en una primera cita habéis sido invitados por esa aún casi desconocida a cenar. Y en el caso de las féminas, obviamente, las ocasiones en que a las primeras de cambio habéis sacado la Visa para pagar esa primera cena (ah! y no sirven excusas del tipo de que él se empeñó en pagar, que ya somos mayorcitas y no siempre muy influenciables).