miércoles, octubre 26, 2005




Desde siempre me ha interesado sobremanera todo lo que gira alrededor de las relaciones de pareja. No sé quién dijo que era una de las pocas aventuras que nos era permitido vivir y sea quien fuere creo que tenía razón. Ojeo todo lo que cae en mis manos sobre este asunto y cuando leo libros de memorias o biografías me fijo especialmente en cómo se relacionaron con el sexo opuesto. Lamento, sin embargo, no poder complacer a los que me preguntaban de dónde había sacado la afirmación de mi post del día 17: son cosas que se te quedan, de la misma forma que acabas sabiendo que tras las vacaciones aumentan las peticiones de divorcio o que las mujeres contraen segundas nupcias en menor medida que los hombres.
De todas ellas hay una que me ha llamado siempre la atención y es el hecho de que la tasa de divorcios en segundos matrimonios sea sensiblemente inferior a la de los primeros. Siempre me he preguntado si era porque la elección, al tener una experiencia previa, había sido más acertada o si, simplemente, caían en la cuenta de que era más de lo mismo. ¿Alguien lo sabe?