miércoles, julio 06, 2005




"Un vibrador le puede cambiar la vida a cualquiera."

Al menos eso es lo que mantienen los chicos de La Juguetería un sex-shop que no lo parece. Nada de cutreces, ni de medias luces, ni ambiente sórdido, ni miradas que se evitan... Allí todo es distinto. Dicen que sueñan "con una sociedad sexualmente abierta, divertida y liberada. Y al promover el uso de juguetes eróticos, ponemos nuestro granito de arena mientras llegue ese día en que nos dejemos llevar por nuestros deseos y nuestra imaginación, lubricados de la cabeza a los pies, con vibradores, dildos y juguetes para todos".
No me diréis que no es una política empresarial como para quitarse el sombrero. ¿O no?