jueves, junio 23, 2005




Los cínicos no sirven para este oficio.
El autor de esta frase mantiene que: "para ser un buen bloguero es conveniente ser buena persona, ser capaz de sentir empatía con el prójimo. Quizá no en todos, pero sí por lo menos en los blogs llamados personales. Ahí dependes mucho de los demás, de lo que te dicen, de cómo te tratan, de adónde te llevan. La dependencia del otro es decisiva. Tal como le trates, te tratarán. Por eso las malas personas no pueden ser buenos blogueros: no pueden comprender a los demás ni ser apreciados por ellos. Ese factor, digamos humano, es importante, aunque no basta, claro está."
Recomienda al bloguero paciencia y trabajar duro: "los lectores acaban reconociendo la calidad de nuestro trabajo y asociándola con nuestro nombre. Si tenemos éxito, es por los demás. Son ellos los que deciden."

Bueno, confieso que he hecho una pequeña trampilla. La primera frase es el título de un libro de Kapuscinski y el oficio del que trata no es el de bloguero sino el de reportero. Pero es que el otro día mientras lo leía pensaba que lo mismo podría aplicarse a los que nos movemos por aquí, ¿o no?